
Las pausas activas son pequeños momentos de actividad que duran entre uno y cinco minutos.
Considéralos como mini ejercicios que se adaptan fácilmente a tu día. ¡No necesitas ir al gimnasio ni tener ningún equipo especial o tiempo adicional!
Para aprovechar los beneficios de las pausas activas, intenta realizar al menos tres (3) pausas activas al día o más.
Estas actividades rápidas se acumulan con el tiempo, ayudan a crear hábitos saludables y mejoran el bienestar general.