¿Cómo cuidar a tu bebé?DESDE EL NACIMIENTO HASTA LOS 6 MESES

HOLA, MUNDO

Yo soy tu bebé. Tú eres mi todo.

ALIMÉNTAME CON COMIDA Y AMOR.

LACTANCIA MATERNA

Tú tienes lo que necesito para crecer.

LA LECHE MATERNA ES EL ALIMENTO PERFECTO PARA MÍ.

Habla con nuestro proveedor de atención médica si solo me estás amamantando para preguntarle si necesito vitamina D adicional. Pregúntale por un suplemento de hierro cuando tenga aproximadamente 6 meses.

ALIMENTACIÓN CON FÓRMULA

Si tomo fórmula, es importante mezclar los ingredientes de la manera correcta. Sigue las instrucciones de preparación que figuran en la lata.

Siempre agrega primero el agua al biberón y, luego, la fórmula en polvo. Si tienes alguna duda sobre la seguridad del agua del grifo, considera usar agua destilada o hervida embotellada y enfriarla a una temperatura segura para mí.

Usa siempre la cuchara que viene incluida en la lata de fórmula. Asegúrate de que esté nivelada.

Luego de sacar la fórmula para bebé preparada del refrigerador, úsala dentro de las 2 horas siguientes.

Una vez que empiece a alimentarme, desecha cualquier fórmula que quede en el biberón después de 1 hora.

Si tu bebé tiene menos de dos meses, nació antes de tiempo o tiene un sistema inmunitario débil, debes adoptar medidas adicionales, como hervir el agua que usas para preparar la fórmula, para evitar que tu bebé se enferme gravemente. Obtén más información sobre estas medidas adicionales buscando: PROTEGE A TU BEBÉ DEL CRONOBACTER (orientación proporcionada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades).

ALIMENTACIÓN CON BIBERÓN BASADA EN LA CONFIANZA

Empieza ofreciéndome solo una pequeña cantidad a la vez: de 2 a 3 onzas de leche materna o fórmula.

Déjame controlar la velocidad con la que me tomo el biberón.

Confía en mí para saber cuándo estoy satisfecho. Presta atención a mis señales. No me obligues a terminar el biberón.

Mantén los biberones preparados en el refrigerador hasta que tengas todo listo para alimentarme y úsalos dentro de un plazo de 24 horas.

Nunca calientes leche materna o fórmula en el microondas. Los “puntos calientes” pueden quemarme la boca. ¡Ay! Mejor calienta mis biberones en agua caliente.

FORMAS EN LAS QUE DIGO "TENGO HAMBRE":

Puedo moverme mucho o girar la cabeza y abrir la boca. Puedo chuparme la mano o quejarme. Aliméntame antes de que llore. Como mejor cuando estoy tranquilo.

FORMAS EN LAS QUE DIGO "ESTOY SATISFECHO":

Dejo de succionar y de chupar el pezón. Puedo parecer relajado o somnoliento. Si me lleno demasiado, puedo fruncir el ceño, quejarme y patear para hacerte saber que terminé. No sigas tratando de alimentarme.

¿CÓMO SABES QUE COMO LO SUFICIENTE?

Mojo 6 o más pañales al día y el médico dice que estoy aumentando de peso y creciendo bien. No me pongas un horario de alimentación. Te avisaré cuando tenga hambre o esté satisfecho.

NECESITO TUS CARICIAS

Cárgame cuando me alimentes.

Me siento seguro contigo y me encanta mirar tu cara.

A veces puedo hacer una pausa mientras como, aunque todavía no esté lleno. Solo quiero descansar o compartir un momento especial contigo.

Ayúdame a permanecer despierto mientras me alimentas. No dejes el biberón sostenido en mi boca. Podría ahogarme o contraer una infección de oído.

NECESITO COMER CON FRECUENCIA

Mi estómago es pequeño.

DESDE EL NACIMIENTO HASTA LOS 3 MESES

¿CÓMO ALIMENTARME CUANDO SOY UN RECIÉN NACIDO?

Ayúdame a estar tranquilo y permanecer despierto.

Cuando soy un recién nacido, salgo de un lugar tranquilo y oscuro hacia un mundo lleno de imágenes, sonidos y sobrecarga sensorial. Para comer bien, necesito ayuda para estar tranquilo, permanecer despierto para que puedas alimentarme como quiero que lo hagas.

Ten en cuenta mis preferencias respecto a la alimentación: sigue mis señales.

No te preocupes por malcriarme. No puedes malcriar a un bebé tan pequeño.

– Presta atención a mis señales y aliméntame cuando quiera comer, cuando esté completamente despierto y tranquilo y antes de que me enoje por llorar.
– Quédate quieta mientras me alimentas. Mantén la alimentación fluida y constante.
– Déjame comer a mi manera: mucho o poco, rápido o lento, constante o intermitente.
– Deja de alimentarme cuando te demuestre que terminé de comer. Me relajaré, bajaré el ritmo y dejaré de succionar.
– Háblame o juega conmigo un rato después de que termine de comer. Colócame en la cama cuando esté tranquilo y adormilado, y déjame dormir.

¡Confía en mí!

Sé cuánto comer. Comeré tanto como necesite y creceré de la manera que sea adecuada para mí si mantienes una División de la Responsabilidad al Alimentar. Como mi padre o madre, eres responsable de decidir qué tipo de alimentación usar: leche materna o fórmula. Yo soy responsable de todo lo demás: cuándo, dónde, cuánto, qué tan rápido.

DESDE LOS 2 HASTA LOS 6 MESES

¿CÓMO ALIMENTARME CUANDO SOY UN BEBÉ?

Cuando tengo aproximadamente 2 o 3 meses, empiezo a aprender sobre el amor. Te miro, sonrío, parloteo y me acerco a ti para llamar tu atención y mantenerte cerca. Si me prestas atención y haces lo que quiero, me demuestras que me amas y me enseña a amarte también. No te preocupes por malcriarme. No puedes malcriar a un bebé tan pequeño.

Sigue la División de la Responsabilidad al Alimentar.

Eres responsable de decidir qué tipo de alimentación usar: leche materna o fórmula. Yo soy responsable de todo lo demás: cuándo, dónde, cuánto, qué tan rápido.

Orienta la alimentación en función de mis señales.

Aliméntame a petición: usa la información que te doy para orientar mi alimentación.

– Aliméntame cuando quiera comer, cuando esté despierto y tranquilo.
– Déjame comer a mi manera: mucho o poco, rápido o lento, constante o intermitente.
– Llévame a la mesa contigo cuando comas. Me encanta estar contigo y empiezo a aprender en qué consiste comer.
– Háblame o juega conmigo un rato después de alimentarme. Colócame en la cama cuando esté tranquilo y adormilado, y déjame dormir.

Espera un poco antes de empezar con los alimentos sólidos.

Empieza con los alimentos sólidos en función de lo que puedo hacer, no de mi edad: cuando pueda sentarme, ver que se acerca la comida y abrir la boca para recibirla. Por lo general, esto sucederá cuando tenga aproximadamente seis meses.

RECUERDA

Todos los bebés son diferentes. Puedo comer cantidades diferentes de un día para otro. A medida que crezco y mi estómago se vuelve más grande, puedo comer con menos frecuencia, pero más cantidad en cada comida.

PRESTA ATENCIÓN A MIS SEÑALES

Hago movimientos corporales y ruidos para hacerte saber lo que necesito. Si prestas atención a estas señales podrás responderme antes de que empiece a llorar. Es más fácil alimentarme cuando estoy tranquilo.

“TENGO HAMBRE”

CUANDO EMPIEZO A TENER HAMBRE, PUEDO HACER LO SIGUIENTE:

“ESTOY LLENO”

CUANDO ME SIENTO SATISFECHO, PUEDO HACER LO SIGUIENTE:

Succionar más lento o dejar de succionar
Relajar las manos y los brazos
Alejarme del pezón
Apartarme
Dormirme
Fruncir el ceño, quejarme o patear si sigues alimentándome

Si mi crecimiento es lento, estas señales también podrían indicar que tengo problemas para agarrarme al pecho o tragar.

REGURGITACIÓN, GASES Y PAÑALES SUCIOS

Es posible que regurgite si intentas alimentarme cuando estoy lleno o si me haces rebotar después de comer.

Trago aire cuando como. Demasiado aire me hace regurgitar o tener gases. Eructar me ayuda a sacar el aire. Espera a que deje de comer antes de hacerme eructar. Cárgame de forma que mi barriga toque tu pecho o tu regazo. Dame golpecitos suaves o frótame la espalda.

Puedo gruñir y ponerme rojo cuando hago deposiciones. Puedo hacer de 1 a 3 deposiciones al día o ninguna durante un día o dos. No se trata de estreñimiento. El estreñimiento es una deposición dura y seca que duele al salir y me hace llorar.

CRECIMIENTO REPENTINO

A medida que crezco, mi rutina puede cambiar y es posible que quiera comer y dormir más de lo habitual. Esto se denomina períodos de crecimiento repentino.

Todos los bebés son diferentes, pero mis períodos de crecimiento repentino pueden presentarse cuando tenga aproximadamente:

Tu cuerpo también sabe lo que necesito y producirá más leche para satisfacer mis necesidades de crecimiento repentino. Cuanto más a menudo amamantes o extraigas tu leche, más leche producirás.

CONSEJO

ÚTIL

Si actúo como si tuviera hambre después de terminar de comer, ofréceme el pecho nuevamente. Si estoy tomando de un biberón, ofréceme un poco más hasta que muestre señales de estar lleno.

¡JUEGA CONMIGO!

Estoy listo para aprender sobre ti, sobre mí y sobre el mundo en el que vivimos. Quiero descubrir lo que mi cuerpo puede hacer.

COLÓCAME UN TIEMPO BOCA ABAJO CUANDO JUGUEMOS.

Cuando esté alerta y relajado, colócame sobre una manta en el suelo. Observa cómo me estiro, pateo y muevo mis brazos. Los estoy fortaleciendo.

¡MIRA LO QUE PUEDO HACER!

Aprendo más cuando me siento feliz, amado y seguro.

DESDE EL NACIMIENTO HASTA LOS 3 MESES

DESDE LOS 4 HASTA LOS 6 MESES

MANTENME A SALVO Y SALUDABLE

Sigue los principios básicos del sueño seguro:
A – A solas
B – Boca arriba
C – en una Cuna

Podemos compartir una habitación, pero no la misma cama. Podría asfixiarme si una almohada o un juguete me tapara la boca o la nariz. Colócame en la cuna, solo y boca arriba cuando vaya a dormir. Usa un colchón firme. No coloques almohadas, edredones, almohadillas protectoras ni juguetes en mi cuna.

Limpia mis encías y mis dientes con un paño limpio, húmedo y suave o con un cepillo de goma o de silicona suave después de cada comida. Programa mi primera consulta odontológica tan pronto como aparezcan mis primeros dientes o cuando cumpla mi primer año, y empieza a usar un cepillo de dientes suave con una cantidad de pasta dental con flúor del tamaño de un grano de arroz dos veces al día. Vigílame siempre para asegurarte de que no me trague la pasta de dientes.

Espera hasta que pueda sentarme solo y abrir la boca cuando vea que se acerca la comida. Esto suele ocurrir cuando tenga aproximadamente 6 meses.

Si me dan alimentos sólidos antes de estar preparado, podría ahogarme o enfermarme.

Lávate las manos antes de preparar mi comida o alimentarme.

Mantenme alejado del humo de tabaco porque daña mis pulmones.

Nunca me dejes solo a la hora del baño o mientras me cambias.

Colócame en una silla de seguridad para niños en el auto. Aprende a instalar correctamente la silla, en el asiento trasero del auto, mirando hacia atrás.

NO me dejes comer estos alimentos hasta que tenga al menos 1 año:

INCORPORA LA MANTEQUILLA DE MANÍ

Si mi proveedor de atención médica lo permite, déjame probar la mantequilla de maní cuando tenga aproximadamente 6 meses. Hacerlo podría evitar que desarrolle una alergia al maní cuando sea mayor.

Consulta con el pediatra las pautas más recientes para prevenir las alergias al maní.

Comunícate con tu consejera de lactancia de madre a madre del WIC de tu localidad para obtener ayuda adicional o con la experta en lactancia materna designada de WIC si tienes preguntas sobre lactancia materna.